La Akebia quinata es una planta trepadora, también conocida como parra de chocolate, que se destaca por sus bellísimas flores y su cautivador aroma a vainilla y chocolate.
Originaria del Este Asiático, pertenece a la familia de las plantas Lardizabalaceae y cuenta con cinco especies conocidas. Además, ha encontrado su lugar en regiones de Europa y América, donde se utiliza para adornar cercos, paredes, rocas y crear muros vegetales.
Esta planta mantiene su follaje durante todo el año, siempre y cuando las temperaturas no desciendan por debajo de 0 grados. En ambientes que varían entre los 15 y 30 grados, su follaje permanece perenne, decorando el espacio con sus vivos colores y encantador aroma.
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Durante las estaciones más cálidas, esta planta despliega sus flores, que pueden variar en tonos rosas y púrpuras. Estas flores no solo añaden un toque visualmente atractivo, sino que también llenan el ambiente con un agradable aroma a vainilla y chocolate.
Iluminación y ubicación
La Akebia quinata ama la luz solar directa, pero en los meses más calurosos, es recomendable ubicarla en un lugar donde esté protegida durante las horas de mayor intensidad solar. Puede prosperar tanto en pleno sol como en sombra parcial.
Riego
Esta planta es resistente a las sequías de corta duración, por lo que no debes regarla hasta que la tierra esté completamente seca. Es importante evitar el encharcamiento para prevenir daños.
Sustrato
El suelo ideal para la Akebia quinata debe ser arenoso y con buen drenaje. Añadir arena a la mezcla de sustrato puede ayudar a mejorar la porosidad y evitar el estancamiento de agua. Puede cultivarse tanto en tierra como en macetas.
Temperatura
Aunque puede soportar temperaturas de hasta -15°C, su follaje se mantendrá verde y vibrante si las temperaturas no bajan de 0°C. Prefiere climas cálidos entre 15 y 30°C.
Propagación y belleza floral
La Akebia quinata puede propagarse mediante esquejes. Elige tallos maduros y sanos, realiza un corte con un cuchillo esterilizado, y coloca los esquejes en un lugar cálido con luz indirecta para que enraícen.
Durante las temporadas más calurosas, esta planta despliega sus bellas flores que pueden presentar tonos rosas y púrpuras, con un aroma a vainilla y chocolate que cautivará a todos.