Para aquellos que nos gusta cosechar nuestras propias frutas y verduras, la planta de tomate suele ser una de las infaltables en cualquier huerta.
Pero si bien disfrutamos al ver aparecer los primeros tomates, lo cierto es que no somos los únicos. Ahí, muy cerca, también existen miles de plagas que esperan agazapas par disfrutar de los frutos de nuestra planta.
Con la idea de ganar esta batalla, hoy te traemos algunos consejos para mantener a raya a los insectos y plagas que pretenden disfrutar de tus tomates. Para ello, lo primero que debemos saber es que una planta sin cuidados aparece más apetecible.
En ese sentido, debemos dedicarnos a mantener nuestras plantas de tomates los más sanas posibles, evitando que aparezcan abolladuras en los frutos y obre todo, raíces fuertes.
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El riego profundo que logra llegar humedecer toda la raíz es un punto muy importante, dado que esto no solo potenciará el crecimiento sino también la salud de nuestra planta.
Para lograrlo, se recomienda regar con abundante agua a primeras horas del día para que la planta pueda soportar el resto del día con altas temperaturas. Además, el riego debe producirse en la base, evitando mojar las hojas y prevenir las enfermedades.
Trucos y aliados
Por otra parte, también podemos valernos de algunos aliados para evitar que las plagas se acerquen a nuestros tomates, rodeando el cultivo con plantas que utilizaremos como barrera.
En ese sentido, nos podemos valer de plantas aromáticas como la albahaca, lavanda, tomillo, orégano, romero, entre otras. También será necesario limpiar todas las malezas posibles y retirar las hojas secas para evitar que la plagas se posen allí y amenazar a tus tomates.