Martes 14 de Noviembre 2023
MARTES 13

Esta es la historia del martes 13, y por qué se lo vincula con la mala suerte

Descubre los motivos que dieron origen al martes 13.

(Fuente: Infocielo).
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Para la mayoría de los países de habla hispana, los martes o viernes 13 son días de mala suerte, de allí el refrán “En martes 13 ni te cases ni te embarques”. Para encontrar la explicación hay que echar la vista atrás. Su origen se encuentra en una serie de referencias que se remontan a la mitología de la Antigüedad, a las religiones abrahámicas y a algunas coincidencias históricas.

El martes 13 ha estado ligado con motivos oscuros en toda clase de culturas y religiones, lo que ha trascendido hasta la actualidad. Si se atiende a la Cábala judía, 13 es el número de espíritus malignos, y, además, representa al carnero que, según la tradición judaica, está asociado con la muerte por ser el animal que sacrifica Abraham a Dios.

En esta línea, el cristianismo ratifica que Jesús fue crucificado un día 13 (viernes, en este caso). La misma cifra coincide con el número de invitados a la Última Cena o con el capítulo del Libro del Apocalipsis en el que aparece el Anticristo.

Incluso en la mitología vikinga encontramos una referencia a la calamidad del número 13, ya que se asociaba a Loki, un dios traicionero y caótico, por lo que esta cifra se consideraba poco fiable.

Sin embargo, fue la tradición grecolatina (la fusión de la tradición romana con la cristiana) quien asoció definitivamente el martes con esta suerte de desconfianza que ya rodeaba el trágico número.

Cuál es el motivo

Los romanos fueron los que dieron nombre a los días de nuestra semana y denominaron este día tan mencionado en honor a Marte, el dios de la Guerra.

Para ellos, la influencia de los dioses en su vida cotidiana era muy importante, por lo cual no recomendaban casarse, ni tomar decisiones importantes en un martes 13, ya que para ellos refería a una fecha sangrienta y dedicada a combatir, lo cual no auguraba nada positivo. Desde ahí, el origen de esta creencia popular que sigue vigente hasta el día de hoy, en la vida de los más supersticiosos.