El Agave es uno de los tantos géneros de plantas suculentas que nos podemos encontrar, el cual se destaca en principio por su amplia gama de usos que van desde la ornamentación hasta la gastronomía.
El Agave es considerado una de las plantas suculentas prehistóricas y la podemos encontrar en diversas variantes, siendo tres las más conocidas: Agave americana, Agave attenuata y el Agave tequilana.
Esta planta es originaria de las regiones más áridas de México y del sur de Estados Unidos y uno de sus principales usos está vinculado a la producción del tequila.
Como cualquier suculenta, el Agave tiene la capacidad de retener agua y nutrientes en sus hojas, llegando a tomar un gran tamaño que las vuelve perfecta para la decoración de cualquier jardín.
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Cabe mencionar que algunas especies de esta planta poseen espinas leñosas, robustas y aplanadas, sumado a la capacidad de resistir varios climas y requerir pocos cuidados.
Algunos usos del Agave
Si bien su aplicación varía según la especie, esta suculenta es utilizada en el ambiente gastronómico para realizar edulcorantes y siropes, bebidas fermentadas como el aguamiel o aguardientes como el Tequila y Mezcal.
Además, con sus hojas, espinas y tallos se fabrican papel, tejas, vigas o clavos e incluso se diseñan instrumentos musicales a partir de su floración.
A todo esto se le suma la cuestión ornamental, la cual se utiliza principalmente como un cerco vivo si se las plata en fila, dado el gran tamaño que suelen adquirir.
Cuidados
En cuanto a los cuidados no hay desasido que agregar, dado que la planta es bastante resistente a los diversos climas. Por el lado de la iluminación, lo más recomendable es que obtengan una buena dosis de luz solar de manera directa en cualquier época del año.Si la tienes en una maceta, requerirá que la lleves al aire libre desde el comienzo de la primavera hasta principios del otoño.
En lo que respecta al riego, el Agave no tolera demasiado las grandes cantidades de agua. En las épocas de bajas temperaturas se recomienda regarla una vez por mes, mientras que en el verano solo dos, aumentando un poco esa frecuencia si esta cultivada en maceta.
Por último, es importante que como toda planta suculenta, se evite el encharcado en el suelo al igual que mojar demasiado sus hojas. Para ello se recomienda plantarla en un terreno árido con un buen drenaje de agua.