La tillandsia, más conocida como clavel de aire, es una planta cada vez más utilizada por los amantes de la jardinería y decoración. Es que se trata de una especie sumamente exótica y llamativa, que ayuda a embellecer cualquier espacio, pues tiene una floración espectacular y muy bonita, de tonos violetas y fucsias. Como si fuera poco, requiere de muy pocos cuidados.
El hábitat natural de esta planta son los troncos de árboles o las paredes de las rocas. Por esa razón, crece en zonas sin sustrato o con muy poco. Para colgar la tillandsia es fundamental que utilices un soporte o recipiente que permita la libre circulación del aire, que es de donde adquiere sus nutrientes. A continuación, los detalles de sus cuidados.
Dónde ubicarla
Los claveles de aire son plantas tropicales que necesitarán estar colgadas en una zona muy iluminada, aunque sin incidencia directa del sol. Es una especie apta tanto para interior como para exterior, debido a que apenas desarrollan raíces y las pocas que producen cumplen la función de soporte.
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No absorben agua, y es muy común colgarlas de soportes decorativos sin apenas sustrato, en lugares bien ventilados y sobre todo alejadas de extremas temperaturas de calor y frío.
Cuidados básicos
El riego: todas las plantas epifitas necesitan un abundante grado de humedad ambiental, ya que es de donde recogen el agua con la que se hidratan. A diferencia de las especies terrestres deberás pulverizar con agua sus hojas.
En los meses cálidos deberías hacerlo diariamente, y en temporadas especialmente calurosas mucho más. Con el frío el riego debe disminuir a dos o tres veces por semana. Se recomienda no usar agua de la canilla, sino de lluvia. En caso de hacerlo déjala reposar 24 horas antes de colocársela.
Abono: como no tiene raíces terrestres que extraigan nutrientes del suelo, la tillandsia necesita que se la alimente con fertilizante específico para plantas aéreas. Para eso, debes diluir el fertilizante en su agua de riego y aplícalo al pulverizar sobre ella, una vez cada 15 días.
Cómo reproducir tillandsias
Esta especie florece una vez sola vez en la vida y antes y después de hacerlo, suelen producir muchos hijuelos. Estos se producen en la base, y son idénticos a su madre. Se recomienda dejarlos pegados a ella hasta alcanzar un tercio de su tamaño.
Se pueden separar con un simple movimientos de mano. Una vez separados, el hijuelo es una planta totalmente independiente que requerirá los mismos cuidados que la madre.