Sabías que el jengibre, además de los fáciles cuidados a la hora de su plantación y crecimiento, es también una especie que esconde un sinfín de beneficios para la salud. Es considerada como una planta medicinal desde hace siglos, añadiendo aportes nutritivos y medicinales a la hora de su consumo.
Se puede plantar tanto en el jardín como en maceta, y en esta ocasión nos centraremos en la segunda opción, focalizando los secretos y cuidados para que crezca y se desarrolle en el interior del hogar de forma simple y efectiva.
Trucos de jardinería: jengibre en maceta
Lo primero que es importante tener en cuenta es que crece en cualquier parte, ya que no necesitará humedad ni le gusta el sol directo. Siempre es recomendable plantar esta especie en primavera, asegurándose que el tubérculo por utilizar sea el más fresco posible.
La maceta para esta planta deberá ser amplia (unos 30 centímetros de profundidad), contar con un buen drenaje y la tierra preparada con la siguiente mezcla: una parte de arena, una parte de compost madura y la tercera parte de tierra. En el centro, en un pequeño orificio, se colocará el jengibre con los rizomas mirando hacia arriba.
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Previo a la plantación se debe preparar el rizoma. ¿Cómo se realiza esto? Simple, se deja la raíz en agua durante toda la noche y luego se corta en pequeños trozos. Cada una de las partes debe tener un par de bultos, ya que desde ahí crecerán las nuevas plantas.
Durante los primeros días se aplicarán pocos riegos y la frecuencia irá aumentando a medida que comience a brotar. Si bien necesitan de suficiente agua, se deben evitar los encharcamientos. A lo largo del primer año, la planta de jengibre puede llegar a crecer entre 40 a 80 centímetros de alto.
Secreto: una vez que la especie adquirió un buen tamaño, se pueden cosechar las raíces de a poco y esto no impedirá que la planta siga creciendo. Gracias a este truco contaremos en el hogar con jengibre todo el tiempo, para implementar en las recetas diarias, con sus nutrientes y proteínas tan saludables.
Los beneficios detrás del consumo de jengibre son las razones principales por las que se debe contar con esta planta en el hogar. Cura la piel irritada, colabora con una mejor digestión, reduce las náuseas, controla el mal colesterol o previene enfermedades cardiovasculares, y en una infusión caliente trata las afecciones de la garganta. ¿Ya lo probaste?