Decorar nuestro hogar con plantas es una tarea muy entretenida, por un lado, le damos a nuestro hogar esos detalles de color, mientras que decoramos cada rincón para darle vida. Una buena planta para decorar nuestro hogar es la alegría de hogar, la cual destaca por sus colores y su belleza.
Esta planta es muy popular tanto en el interior como en el exterior del hogar, esto se debe a que es una especie que tiene una gran capacidad de floración, cuenta con un rápido crecimiento y al mismo tiempo destaca por ser muy resistente.
Se tratan de plantas que provienen de África, la misma llega a medir hasta 60 cm de altura y destaca por su capacidad de producir flores durante todo el año, siempre y cuando reciban los cuidados necesarios. Los colores de sus flores pueden ir del blanco al rojo, pasando por rosados y lilas.
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A continuación, te vamos a compartir cuales son esos cuidados que necesita, sobre todo para que se vea frondosa y al mismo tiempo se desarrolle de manera adecuada y así decore cada espacio del hogar donde la coloques.
Cuidados para la alegría del hogar
Ubicación
La alegría del hogar necesita encontrarse en un espacio con mucha iluminación, pero sin estar expuesta al sol directo, si la plantamos en el exterior, debe ser en un lugar donde tenga semisombra y no corra el riesgo de recibir temperaturas muy bajas ni altas.
Humedad
Es una planta de zonas tropicales, por lo que si el sitio donde vives tiene temperatura bajas de hasta 13° la planta puede que no viva mucho, puede llegar a soportar temperaturas de hasta 24° pero es recomendado que en donde esté sea por debajo de esta temperatura.
Abono
Si quieres aplicarle abono es recomendable que sea el líquido y se recomienda añadirle en los primeros meses de verano, en invierno se puede dar un poco más o detenerlo si el clima de la zona en donde vives es muy frío.
Riego
Por último te contamos el detalle más importante para cualquier planta tanto en el interior como en el exterior, los riegos de esta planta deben ser abundantes, ya que necesitan que su sustrato siempre esté húmedo, pero no encharcado. Debe regarse 2 o 3 veces a la semana durante el verano y la primavera, mientras que en el invierno cada 10 días.