La vegetación utilizada en el hogar de forma ornamental está en su pico de popularidad. Las familias han encontrado en distintas variedades de plantas un divertido pasatiempo como jardineros, pero también atendiendo a los beneficios que aportan.
En esta ocasión presentamos la Peperomia caperata, también conocida como cola de ratón. Es una planta herbácea y perenne originaria de Brasil. Si bien se puede plantar en el jardín, su tamaño es ideal para que repose dentro del hogar, no supera los 20 centímetros, tanto de ancho como de largo.
Secretos de jardineros: atención con sus cuidados
La belleza de esta especie radica en la forma de corazón que adoptan las hojas con una tonalidad rojiza, mientras que las flores alcanzan un tamaño que va entre los 5 y 8 centímetros de largo, en color blanco. Si bien no demanda de exhaustivos cuidados, sí habrá que tener atención en varios aspectos.
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Debido a su hábitat natural (las selvas tropicales de Brasil) se debe evitar que esta planta reciba luz solar directa; puede ser indirecta o filtrada por la presencia de otras especies. Sea de interior o en el jardín, se debe prestar atención con la iluminación directa, ya que puede dañar sus hojas y flores.
El riego, su frecuencia y cantidad, es otro de los aspectos para tomar nota. Se debe aplicar agua solamente cuando la tierra esté seca, o sus hojas estén apagadas, caso contrario siempre es mejor no regarla ya que no resiste los encharcamientos. La frecuencia ideal sería de 3 a 4 veces por semana en verano, y reducir considerablemente la cantidad en las demás estaciones.
Al necesitar humedad constante, también demandan un sustrato especial. Se recomienda turba gracias a su buena aireación, y la segunda opción sería mezclar tierra de compost con algún drenaje. Si se planta en maceta la combinación ideal son partes iguales de humus, grava y turba negra.
Técnica para la reproducción
La técnica ideal, y de probada eficacia, es a través de los esquejes de hojas. El procedimiento comienza cortando las hojas, asegurándose de dejar 2 a 3 centímetros de peciolo, es decir el filamento que la une con el tallo.
Se planta en macetas pequeñas, utilizando tierra de turba con un pH de 5,5. Es importante que las hojas no toquen la tierra, ya que se pueden pudrir o marchitar con los riegos. Durante el primer mes se debe mantener el sustrato húmedo y ubicada bajo luz directa.
Ya sea por la particular forma de las hojas, sus flores blancas y el tamaño ideal para reposar en espacios interiores, esta planta se ha transformado en un gran valor de los hogares. Sus cuidados no revisten de gran complejidad, pero sí especial atención en algunos aspectos.