En PH, Podemos Hablar el conductor, Andy Kusnetzoff busca que los invitados expresen sus emociones realizando diferentes consignas y propuestas que surgen durante el programa. Es allí donde se crean momentos de mucha sensibilidad y los invitados se abren y hablan de sus sentimientos como nunca antes.
El ultimo programa no fue la excepción. Quienes compartieron una emotiva noche con Andy fueron la actriz Laurita Fernández, la exconcursante del Gran Hermano Romina Uhrig, el famoso cantante Raúl Lavié, el rapero argentino G Sony y el chef Donato de Santis.
En la sección de la fuente de agua, donde cada participante debe pedirle al agua que se lleve lo que quiera o que traiga lo que anhelan, Romina Uhrig y Laurita coincidieron en un deseo especial: que el agua se lleve sus inseguridades y les brinde la capacidad de actuar con libertad y firmeza frente a las situaciones que se les presenten. Luego de ellas le siguieron G Sony, Raul Lavie y finalmente fue el turno de Donato de Santis.
El momento emotivo
El reconocido chef comenzó diciendo: "Como budista, a nosotros nos enseñan que, para conocer el presente, hay que mirar al pasado. Y para conocer el futuro, también hay que mirar el pasado porque el presente es el fruto de todo eso”. Mientras miraba al fuego que tenia delante de sus ojos aseguro continuo: “Asique no quiero recuperar nada”.
Te podría interesar
Después se quedó totalmente en silencio, con lágrimas en sus ojos. Respiró hondo durante unos segundos y aseguró: “Hay una cosa que me hizo mierda”. Tiró la moneda y volvió a su lugar.
Frente a la mirada complaciente de los demás solo agrego “Y quiero que se vaya”. Despues de ese momento Andy Kusnetzoff comentó que se revelaron situaciones muy intensas y posteriormente le preguntó al chef cómo se encontraba y si quería compartir esas experiencias, pero Donato se negó rotundamente: "No, mejor no".
En ese instante, el conductor, apoyando su mano sobre el hombro de Donato, les sugirió pasar a tomar algo para aligerar el ambiente melancólico que persistía en el estudio. Entre risas, añadió: "No hay nada que un buen trago no pueda mejorar".