El Llantén es una planta alimenticia y medicinal que, aunque crezca como maleza o mala hierba en muchas las partes del mundo, desde la antigüedad es apreciada por sus múltiples nutrientes y propiedades. Sus hojas contienen hierro, vitaminas y antioxidantes.
Si bien esta planta no es muy valorada popularmente, se caracteriza por aportar enormes beneficios para la salud y el bienestar. Las propiedades del llantén medicinales son conocidas en Europa desde hace siglos utilizada como expectorante, diurético, antiinflamatorio y cicatrizante, entre otras cosas. A continuación, más detalles sobre sus usos.
Para qué sirve el llantén
Esta hierva sirve para curar lesiones oculares utilizando el agua de la decocción para limpiar los ojos en caso de infección.
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Si se llegara a tener alguna afección o herida sobre la piel, solo basta con machacar sus hojas, y frotarla sobre la parte que se quiera curar para aliviar la zona.
También reduce resfriados, gripes y afonías. En caso de enfermedades de vías respiratorias, el llantén ayuda a despejar los pulmones, faringe y laringe mientras los protege con su capacidad antimicrobiana, ayudando también a disminuir la fiebre.
Por otra parte, colabora con la digestión, facilita el tracto intestinal, disminuye la acidez estomacal y el reflujo.
Como si fuera poco, alivia el estreñimiento, sirve para detener diarreas, disminuir gases y cólicos causados por los mismos. Varios motivos, para que puedas tenerla en cuenta de ahora en más.
Cómo aprovecharla en infusión
Para preparar esta infusión casera con beneficios para la salud, primero tienes que hervir una taza de agua y, después, agregarle una cucharada sopera de llantén machacado. A continuación, tapa la preparación y espera cinco minutos a que el agua se infusione.
Este remedio sirve si se consume una dosis de tres a cuatro tazas al día, preferiblemente después de cada comida para fomentar la buena digestión. Sin embargo, es recomendable que el periodo de infusión de esta planta no sobrepase el mes.