Según un informe publicado en la revista National Geographic, a consecuencia de los cambios climáticos, en la isla de Signy, archipiélago de las Orcadas del Sur, las poblaciones de las especies vegetales autóctonas Deschampsia antarctica y Colobanthus quitensis se han extendido de una manera muy veloz. Estos estudios fueron realizados por un equipo científico de la Universidad Italiana de Insubria.
La primera de ellas, la Deschampsia antárctica, se ha extendido durante el período del 2009 al 2018, cinco veces más rápido que en los últimos cincuenta años. La especie Colobanthus quitensis aumentó en casi diez veces su presencia en la Antártida durante ese período. El cambio climático es determinante en este fenómeno.
Los científicos observaron que el aumento de la población vegetal es coincidente con el aumento de las temperaturas de los veranos antárticos. Otra de las causas se la atribuyen a la menor presencia de focas, que ya no pisan las floraciones en la isla, porque emigran a otras zonas en busca de alimento.
Los científicos publicaron un artículo en la revista Current Biology, donde sostienen que:
“Nuestros hallazgos apoyan la hipótesis de que el futuro calentamiento provocará cambios significativos en estos frágiles ecosistemas antárticos”
Consecuencias y cambios en los ecosistemas antárticos
Las consecuencias que ocasiona la proliferación de estas plantas son algo que todavía no se puede terminar de dimensionar.
Seguramente provocará cambios en la composición del suelo, otorgándole mayor acidez, lo que puede estimular un mayor crecimiento de líquenes, bacterias y hongos. La pérdida de la capa de hielo permanente o “permafrost”, podría provocar una gran cantidad de cambios en el ecosistema antártico.
En el artículo los científicos sentencian que otro gran peligro latente, es la posibilidad de que otras plantas no autóctonas, colonicen estos ecosistemas que antes permanecían aislados.
Asimismo, aseguran que:
“Los actuales niveles de calentamiento atmosférico podrían ya haber desencadenado la migración de especies como musgos, líquenes, plantas e incluso algunos invertebrados.”
Existen compromisos internacionales que desde el año 1992 a partir de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) firmaron 196 países.
Es importante tomar conciencia de estas problemáticas y acompañar las acciones necesarias para asegurar el futuro de los recursos naturales, los ecosistemas y su biodiversidad.
Los representantes de los países que conforman la CMNUCC, se reúnen anualmente en busca de respuestas y negociaciones multilaterales para combatir y mitigar los efectos del cambio climático.