Los rosales son una especie de arbusto espinoso de la familia de las rosáceas. Son originarias de las zonas templadas del hemisferio norte y la mayoría de las especies que poseen hermosas flores se cultivan para ser usados con fines decorativos, aunque también se elaboran aceites esenciales y se les dan usos gastronómicos y medicinales.
Este arbusto de bellísimas flores, tiene su período de floración en la temporada primavera-verano, frente a lo cual, se deben extremar los cuidados de la planta, protegiéndola de posibles plagas, así como también del calor extremo. Si bien los rosales son plantas que necesitan sol, no deben estar expuestas a demasiado calor, frente a lo cual, lo conveniente es tapar el ó los rosales, sobre todo en las horas de sol más fuerte. En el caso de que los tengas en maceta, puedes moverlas a la sombra.
En esta oportunidad te comentaremos cuales son los cuidados principales que necesita este arbusto para que crezca fuerte y sano en esta temporada.
Cuidados básicos
Primero debes tener en cuenta que es muy importante fertilizar tus rosales, por lo menos dos veces al año. Si puedes, también debes ponerle abono orgánico.
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Para que crezca y florezca mucho mas fuerte, debes eliminar las flores que estén marchitas y podar los tallos débiles que aparecen en la base, estos no dan flores, por lo tanto, no le perjudica en nada que los quites.
En la temporada de verano es fundamental el riego, sobre todo cuando estén saliendo las hojas y las flores. Es importante regar la base de la planta y no el follaje para evitar que proliferen hongos.
Remedios caseros
Si tus rosales aún son pequeños, es recomendable que limpies sus hojas, una por una con una mezcla preparada con una cucharada de bicarbonato de sodio y ¼ cucharadita de detergente por 4 litros de agua. De esta forma puedes evitar la plaga conocida como punto negro.
Otras enfermedades que pueden sufrir los rosales son los hongos, por ejemplo la Roya o el Oídio, también el negro que son costras negras que aparecen sobre la hoja y provocan su caída. En cuanto a plagas, la que más afecta a las rosas es el pulgón verde.
Otro remedio muy práctico consiste en poner trozos de madera en la tierra donde tienes plantadas las rosas a modo de manto. De esta forma no crecerán las malas hierbas alrededor y protegerás tus raíces.
Además, este ultimo remedio, sirve para que en el verano la tierra se mantenga templada y húmeda, así no se seca rápidamente.
Con estos consejos prácticos podrás mantener a tus rosales, no sólo lograrás más y mejores flores en el verano, sino que también una mejor vida de la planta durante el invierno.