Como es sabido, muchas especies de plantas tienen más de un nombre que está directamente relacionado a sus orígenes o, en mayor medida, a la apariencia de sus hojas o flores más llamativas, tal como es el caso de la planta Cortaderia selloana.
Sucede que esta planta que también es conocida como “cola de zorro”, “hierba de las Pampas” o simplemente “cortadera”, además de tener múltiples nombres tiene características que la convierten en una especie sinigual de la cual hablaremos a continuación.
Los especialistas en la materia aseguran que esta especie originaria del sur de Sudamérica es sin dudas un verdadero ejemplo de resistencia ya que puede sobrevivir en condiciones extremas, como sequía, fríos intensos y hasta en suelos alcalinos, ácidos, arcillosos y arenosos
Por otro lado, la “Hierba de las Pampas” se caracteriza por formar un intenso follaje debido a que su altura puede llegar a los tres metros de altura y sus finas hojas verdes de un centímetro pueden extenderse hasta los dos metros, motivo por el cual suele emplearse también para delimitar espacios.
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No obstante, lo más llamativo de su aspecto son sus flores, ya que son una densa panícula blanca o rosadas que por su parecido a la cola del zorro se ha adueñado de esta denominación.
Al mismo tiempo, las flores de esta conocida especie aparecen recién a fines del verano y es justamente allí cuando cada flor comienza a liberar alrededor de 100 mil semillas durante el año, llegando a sitios impensados por su ligero peso que las traslada al son del viento.
Por último, es importante mencionar que la “Cortadera”, cuyo nombre le asignaron por el filoso borde de sus hojas que puede provocar heridas, es empleada también como una especie medicinal ya que aseguran que tiene propiedades para bajar la fiebre o para actuar como un potente diurético.
Lo malo
Si bien la Cortaderia selloana tiene numerosas bondades, los expertos aseguran que se trata de una especie invasora muy dañina fuera de su ecosistema local, lo que provocó que en Europa decidieron erradicarla por completo ya que está perjudicando el ecosistema y los cultivos.
Por otro lado, diversos artículos señalan que esta planta que abunda en la región pampeana y en la Patagonia de Sudamérica provoca fuertes reacciones alérgicas por lo que muchos prefieren tenerla lejos antes que sufrir las consecuencias.