El amor de un niño no entiende de barreras, vallas ni agentes de seguridad. Sobre todo cuando se trata de alcanzar a pocos metros al ídolo que te emociona. El pequeño brasileño Rogerio dio un ejemplo de valor y se llevó su premio.
No es tan habitual ver a un niño brasileño asegurando que deses que gane Argentina, como ver a Messi recibir el incondicional amor de los pequeños de todo el mundo. Rogerio no solo ama al crack del PSG sino que quería una victoria de la albiceleste por sobre la Verde-amarela.
La escena fue captada por las cámaras de televisión. Como es costumbre, los medios de comunicación se apostan en el vallado cercano a donde los jugadores bajan de los colectivos, para intentar lograr imágenes de los jugadores llegando al estadio.
Los lentes trataban de enfocar el caminar del rosarino, develar si el capitán argentino tenía alguna molestia al caminar, luego de la brutal agresión del defensor venezolano que casi lo lesiona gravemente.
En cambio, registraron la corrida desesperada de Rogerio que fue en busca de una foto con el 10. Esta vez, el personal de seguridad pudo retener al chico, pero tanto Messi como quienes lo acompañaban intervinieron para que suelten al chico para disparar la deseada selfie.
"Un sueño realizado", comenzó el posteo en el que inmortalizó la foto el mini fanático. "Salté la valla, regateé como Messi, fui iluminado por Maradona y cumplí el mayor sueño de mi vida. Gracias Messi", relató Rogerio.
Todavía emocionado, y mientras exhibía su foto con el capitán argentino, el "garoto" fue entrevistado por el cronista de TyC Sports y sorprendió aún más por la seguridad con la que dijo "gana Argentina 2 a 0" y que él hinchaba por el equipo que dirige Scaloni.
Rogerio tal vez haya sido el único que se fue a dormir contento esa noche, ya que el partido finalmente fue polémicamente suspendido a los pocos minutos de haber comenzado, tras la interrupción de autoridades sanitarias que aseguraban que los 4 jugadores argentinos provenientes de Inglaterra tendrían que estar haciendo cuarentena.